La procesionaria del pino es una mariposa nocturna que en la fase de oruga se caracteriza por estar recubierta por unos pelos urticantes que, en caso de contacto, producen reacciones más o menos graves, siendo especialmente relevantes en niños y animales de compañía. A veces, cuando se sienten amenazados, estos insectos lanzan dichos pelos urticantes al aire, por lo que no siempre es necesario el contacto para resultar afectados.
Estas orugas anidan en pinos, abetos y cedros y pueden ocasionar el defoliado de los mismos y en casos extremos la muerte de éstos. Dichos nidos, que se visibilizan a modo de características bolsas de seda blanca, albergan entre 100 y 300 orugas, que descienden de los árboles para enterrarse en el suelo, momento en el cual es cuando se genera el mayor riesgo para personas y animales.
La llegada de la primavera favorece la aparición de esta oruga que podemos encontrar a nivel del suelo en algunos puntos próximos a pinares de nuestra ciudad. El contacto con estos insectos por parte de personas o animales puede ocasionar efectos indeseados en la salud, por lo que resulta aconsejable tomar algunas medidas de protección.
La Concejalía de Medio Ambiente y Movilidad viene programando en los últimos años campañas de control de esta plaga mediante tratamientos de endoterapia, que funciona a partir de la capacidad de flujo de la savia que hay en el interior de los tejidos vasculares (xilema) de los árboles, de manera que de forma inofensiva para la salud humana y el medio ambiente, está teniendo buenos resultados en la ciudad. Igualmente se suman a las actuaciones municipales la eliminación de los nidos de forma manual mediante pértigas y tijeras.
Si se observa su presencia de este insecto en las calles o en los árboles de los espacios públicos, se ruega a los vecinos que lo pongan en conocimiento de la Concejalía de Medio Ambiente.
Igualmente se aconseja extremar la precaución al pasear por espacios en los que se hayan detectado estas orugas para no entrar en contacto con ellas.
Cómo actuar si observa procesionaria del pino en arbolado público
–Evite el contacto con las orugas por el pelo urticante que las recubre. No sólo puede provocar una lesión en la piel sino también una reacción alérgica.
–No toque las orugas puesto que puede contribuir a la dispersión de estos filamentos por el aire y que lleguen a otras zonas, pudiendo afectar a niños, adultos o mascotas que no llegan a identificar el origen de la reacción que puedan estar sufriendo.
Cuando observe la presencia de este insecto en las calles o en árboles que forman parte de los espacios públicos, se ruega ponerlo en conocimiento de la Concejalía de Medio Ambiente para la adopción de las medidas oportunas.
Recomendaciones en caso de entrar en contacto con los pelos urticantes de la procesionaria:
– Si entra en contacto con una, lave la zona con agua y en la medida de lo posible, aplique frío. Acuda a su centro de salud o urgencias si es preciso, o póngase en contacto con el 112.
– En el caso de los animales, la reacción es inmediata, observándose una hipersalivación, inflamación de la lengua que adquiere color rojo o amoratado, ampollas con líquidos y úlceras.
– Si desafortunadamente no hubiera sido posible evitarlo y observa que el animal está sufriendo un cuadro alérgico, acuda inmediatamente a su veterinario o a urgencias de la zona para tratar lo antes posible a su mascota.
De igual manera, se deben llevar a cabo los tratamientos necesarios en los espacios privados por parte de los propietarios o comunidades de vecinos, ofreciéndose desde la Concejalía de Medio Ambiente el asesoramiento necesario al respecto.