Egido: «Hay que cambiar la sensación de que Alcalá es una ciudad sucia»

Entrevista con Alberto Egido, concejal de Medio Ambiente y Movilidad

Su carácter afable y educado se ha ganado al resto de componentes del equipo de Gobierno y también, lo que es más difícil, a los de la oposición. «Se podrá estar de acuerdo o no, pero es una persona con la que se puede dialogar», dicen desde los bancos rivales. Alberto Egido fue el cabeza de lista de Somos Alcalá y tiene una ardua tarea: que Alcalá esté limpia. No es una empresa fácil, aunque sí mejorar la estadística de la OCU: la ciudad complutense es la más sucia de España.

En esta entrevista, Egido también habla de la remodelación de las líneas de autobús, del río Henares, del carril-bici o de la temida peatonalización.

-¿Qué pasa con la limpieza? Somos la ciudad más sucia de España, según la OCU.

– Todo problema tiene solución. Estamos trabajando en las múltiples soluciones que tiene un problema tan poliédrico. Está la vertiente de hacer que la empresa cumpla con el contrato, está la vertiente de concienciar a la ciudadanía para que todos pongamos nuestro granito de arena y está la vertiente de que las administraciones seamos más eficientes, sobre todo a nivel de coordinación con otras concejalías. Hay que cambiar la sensación de que Alcalá es una ciudad sucia.

– ¿Y qué medidas se están adoptando para cambiar esa sensación?

– Estamos trabajando con la empresa en una reestructuración de los medios, ya que no podemos destinar una partida mayor económica dada la situación financiera. Entendemos que se puede optimizar la actual partida presupuestaria. También estamos intentando mejorar la coordinación con más policía local de paisano, asegurando que las ordenanzas municipales se cumplen, y estamos incidiendo en la concienciación ciudadana.

Estamos intentando mejorar la coordinación con más policía local de paisano, asegurando que las ordenanzas municipales se cumplen

– ¿Somos más sucios los alcalaínos o es que se limpia peor?

– No diría que somos más sucios que otros y tampoco que se limpia peor. Hemos tenido contacto con la sección sindical y defienden el empeño de sus trabajadores en hacer bien su trabajo. El problema es que cuando se implanta una sensación de que la ciudad está limpia, todos relajamos los niveles de exigencia. Puede ser que la administración, la empresa y la ciudadanía lo hayan hecho.

– ¿Se van a poner más multas?, ¿más policía de paisano?

– La idea no es recaudatoria, sino disuasoria. La ciudadanía tiene que saber que si hacen las cosas mal, tienen unas consecuencias negativas, pero no para que esas sanciones llenen las arcas municipales, sino para que la ejemplaridad de las mismas haga que el comportamiento cívico de la ciudadanía vaya en aumento.

– ¿Cómo van a mejorar el servicio tras hablarlo con la empresa?, ¿se van a limpiar más zonas que otras?

– Hay algunos servicios que suponen una gran cantidad de horas que se pueden optimizar. Por ejemplo, al mercadillo de los Lunes acude una brigada de unos ocho trabajadores para recoger los restos que depositan los comerciantes en el suelo. Hay contenedores para que se depositen en el suelo y no lo estén haciendo así. Con ese refuerzo policial podíamos ahorrar bastantes cuadrillas destinadas a este servicio y dirigirlas a otros puntos de la ciudad. Otro ejemplo es en cuanto a la recogida de residuos sólidos urbanos. Hay múltiples sistemas de recogidas de basura y estamos intentando optimizar rutas y servicios para que la carga trasera y lateral sea lo más predominante.

– ¿Cómo se puede deber 11 millones de euros con la ciudad como está?

– Es difícilmente explicable. Cuando estudias el contrato y los modificados, ves que los tres modificados vigentes para abaratar el servicio, el Ayuntamiento ha ido perdiendo capacidad de fiscalización del servicio, han perdido muchas mejoras que suponía 3,7 millones de euros. Pero lo cierto y verdad es que el precio inicial del contrato era 14,85 millones de euros y ahora está en 17,8 millones. Una de las explicaciones para llegar a esta situación es que al ser un contrato a largo plazo que se firma en 2007 y finaliza en 2027 tiene un coeficiente de actualización. Firmar contratos a largo plazo no te permite adaptarte a las novedades legislativas o la situación económica del momento. Estamos hablando con la empresa y han entendido que la situación no es admisible y están mostrando una actitud colaborativa y poniendo de su parte para revertir esta situación.

Alberto Egido

– Es también concejal de Movilidad. ¿Hay alguna novedad en estos 100 días sobre el proyecto de remodelación de las líneas de autobús?

– Nos hemos reunido con el Consorcio Regional de Transportes y en la Mesa de la Movilidad. Es un tema que tenemos que abordar lo antes posible porque se ha aplazado durante mucho tiempo. Tenemos que repensar la actual estructura de las líneas de autobús. Lo vamos a abrir a la participación ciudadana, para que opinen y decidan al respecto. Se hizo un trabajo bastante detallado en las anteriores mesas de movilidad de la anterior Corporación municipal, que en este caso hay que reconocerle la tarea bien hecha. Ese trabajo detallaba una posibilidad de estructuración de líneas, que propone cambiar el modelo centrado en la Plaza de Cervantes por otro mucho más polinuclear, porque la ciudad ha crecido muchísimo.

Tenemos que repensar la actual estructura de las líneas de autobús

– ¿Entonces se va a tomar ese modelo o introducirá novedades?

– Se va a estudiar lo bueno que tenía ese modelo, pero no se va a asumir tal cual, porque otra de las cosas que queremos hacer es que a través de la Universidad hubo personas trabajando en un sistema de información geográfica que permitía calcular los tiempos de desplazamientos con esa redistribución de paradas. No se llegó a culminar ese estudio. Volveremos a hablar con la Universidad para ver si tienen estudiantes interesados en desarrollar sus estudios fin de carrera en este ámbito, sumarles al equipo de estudio.

– Por ejemplo, una línea circular tardaría mucho en dar la vuelta.

– La línea circular es una buena línea, pero para ser operativa tiene que ser muy eficiente, con un número deparadas muy determinadas y transitar por carreteras poco congestionadas para que la fluidez nos permita mantener los tiempos de desplazamientos. Tal vez sería la reestructuración general provocaría que la parada no estuviera en nuestro portal, que tuviéramos que andar un poco más, pero el tiempo de desplazamiento sería similar y se cubriría más espacio con el mismo servicio. Es otro de los limitantes: el Consorcio te cobra por metro recorrido. Si aumentas el recorrido, se incrementa el coste y tenemos que tener presente que tenemos una deuda de 8 millones de euros con el Consorcio.

La línea circular es una buena línea, pero para ser operativa tiene que ser muy eficiente

– ¿No deja de ser un poco injusto que debamos ese dinero al Consorcio sin una estación de autobuses, con cada vez más paradas de tren entre Madrid y Alcalá, sin más Civis y sin siquiera tener una gran inversión como el Metro sí han tenido otros municipios?

– La situación viene muy limitada por el actual plan de ajuste y la deuda. Entiendo que la ciudadanía se pregunte dónde ha ido a parar los más de 300 millones de deuda si no se ha hecho ninguna gran infraestructura, no tenemos unos servicios públicos municipales correspondientes a esa deuda. Intentaremos responderlo a través de la auditoría que estamos haciendo.

– ¿Para cuándo estaría lista esa remodelación de las líneas de autobús?

– Una de las cuestiones de las que estamos pendientes es de un estudio que va a realizar el Consorcio respecto al uso de las paradas, de volúmenes de desplazamientos. Parece que este año le tocará a Alcalá.

– El otro día el alcalde habló de dos opciones para la posible estación de autobuses: la antigua Gal y cerca del centro comercial Alcalá Magna.

– Igualmente, es una cuestión en la que busquemos e consenso y la decisión óptima.

– El carril bici de Alcalá es muy amplio, pero en algunos puntos está desconectado o está en mal estado. ¿Qué tienen pensado?

– Lo que tenemos pensado en cuanto a la movilidad en bicicleta es que sea operativa. ¿Qué quiere decir eso? Que habrá tramos de carril bici que sean aprovechables y otros que por su mal diseño original no lo sean. Un tramo que nace y muere en acera es difícilmente integrable en una red de bicicletas transitable. Estamos trabajando con diferentes colectivos que apuestan por la movilidad sostenible y han hecho un gran trabajo para detectar puntos negros, de lugares donde con una pequeña obra se podría ganar mucho. Y en ese sentido vamos a trabajar en la Mesa de Movilidad. Queremos ser lo más rápidos e intentar que esté comenzado el plan antes de verano de 2016.

Veremos qué calles podrían ‘pacificarse’ para limitar la velocidad a 30 kilómetros por hora

– ¿Qué inversión sería?

– Queremos asumir esa mejora con los propio medios municipales. Además, muchas veces no vamos a usar los carriles bicis. Gracias a estas asociaciones que han hecho un trabajo de campo encomiable, se va a decidir qué calles podrían pacificarse para limitar la velocidad a 30 kilómetros por hora, como ya pasa en algunas calles de la ciudad. Bastará con una señalización que advierte de que van a transitar por allí las bicicletas. Así, el resto de vehículos serán conscientes de que esa calle es amigable para bicis.

– Es decir que esos tramos inconexos del carril bici se van a conectar con calles con límites de velocidad.

– Eso es. Tenemos que cambiar el concepto y asumir que la bicicleta es un vehículo más. Su espacio no es la acera, sino la carretera.

– Pasamos de las cuatro ruedas a las dos piernas. ¿Está a favor de la peatonalización en el Centro y de la Plaza de Cervantes?

– Tenemos una idea de realizar un plan de movilidad urbana sostenible y habrá que estudiar todas las posibilidades. En cualquier caso, una peatonalización tiene que ser un proceso muy trabajado. Uno de los actores principales serían comerciantes de la zona. Cuando Manuel peinado trato de peatonalizar toda la zona Centro hubo una rebelión quizás porque no fue participado, consensuado ni consultado. Cualquier decisión tendrá que venir refrendado por un amplio consenso popular.

Gastar 18 millones de euros que desnaturalice el rio Henares con las urgencias sociales que tenemos me parece inadecuado

– Turnos del rio Henares. El proyecto duerme el sueño de los justos. ¿Se ha hablado con el Ministerio de Medio Ambiente para rescatar ese proyecto que creo que era de 17 millones de euros?

– Gastar 18 millones de euros que desnaturalice el rio Henares con las urgencias sociales que tenemos me parece inadecuado. Tenemos que poner en valor lo que tenemos. El río es un espacio natural protegido y como tal tenemos que tratarlo. Lo mejor que se puede hacer es tratar de conservar y naturalizar el entorno, que la propia naturaleza quien con sus tiempos vaya dictando qué es lo que quiere que haya en sus márgenes. Si dejamos que actúe la naturaleza, va a ser la mejor arquitecta. Así Vas a poder evitar crecidas o pérdidas de margen de la orilla. El río tiene que ser amigable para la ciudadanía y ser un espacio de encuentro y recreación creemos que será más que adecuado.

– ¿No vive Alcalá de espaldas al río?

– Hay una cuestión casi psicológica. En muchas partes del río, el ciudadano se encuentra con el Henares desde la altura, eso hace que le puede resultar un poco ajeno y distante, salvo puntos concretos con puntos de pescadores o zonas donde te puedes sentar a leer.