En Alcalá de Henares conviven 123 nacionalidades distintas. Personas rumanas, chinas, polacas, marroquíes o búlgaras forman algunos de los colectivos más numerosos en nuestra ciudad. Un crisol cultural que se ve reforzado por la condición de ciudad universitaria: cada año miles de estudiantes de diferentes países deciden trasladarse unos meses a Alcalá para estudiar en una Universidad referente y que durante su estancia llegan a apreciar la riqueza de la ciudad de Miguel de Cervantes.

Y esta realidad es una herencia natural de nuestra historia. Durante los siglos XIII, XIV y XV convivieron en Alcalá las culturas cristiana, judía y musulmán.

No es por tanto de extrañar que nuestras vecinas y vecinos estén más que acostumbrados a que su vecino de enfrente hable árabe o a que la panadería la regente una familia rumana. A pesar de que somos una de las pocas ciudades donde aún persisten grupos violentos fascistas organizados, las alcalaínas y alcalaínas somos gente abierta a la diferencia y nos sentimos orgullosas y orgullosos de la ser una sociedad rica y diversa.

Con este espíritu, y dentro del contexto del Día Mundial de la Diversidad Cultural para el Diálogo y el Desarrollo, se organizaron hace algunos días las I Jornadas de Diversidad Cultural. Bajo el título “Alcalá de Henares, cuna de culturas. Ayer y hoy” la plataforma juvenil ¡oh!Project que utiliza el arte como un método de diálogo intercultural, en colaboración con la concejalía de Acción Social que encabezo (foto inferior de Suso Abad junto a la edil Laura Martín), organizó estas jornadas junto a la Universidad de Alcalá de Henares y diferentes colectivos y asociaciones de la ciudad.

El objetivo fundamental era seguir fomentando el diálogo que ya se da de forma natural entre civilizaciones, culturas y religiones diferentes de nuestra ciudad, y trasladarla a espacios de ocio y reflexión.

A través de exposiciones de arte y fotografía, danza, teatro y juegos, algunos cargados de historia como los “juegos medievales alcalaínos”, las actividades pretendían mostrar a Alcalá como la ciudad cosmopolita y diversa que es, abierta a la riqueza y la diversidad cultural.

Para que eso siga siendo así durante muchos años más, a pesar del auge en Europa de expresiones xenófobas y de odio frente a la inmigración, es vital seguir trabajando por el diálogo intercultural, integrando a todos los grupos que viven y construyen Alcalá junto a todas y todos nosotros, y dando un impulso especial en el ámbito educativo para que nuestras niñas y niños crezcan sabiendo que nada te hace más rico que conocer y comprender otras realidades, otras tradiciones y, en definitiva, otras culturas.

Estas jornadas han sido también una oportunidad de oro para demostrar la excelente salud de la que goza el tejido asociativo de Alcalá. Numerosos colectivos, así como vecinas y vecinos, se han volcado en la organización y la realización de estas jornadas, asegurándose así que fueran un éxito rotundo y fortaleciendo la unión entre entidades públicas como el Ayuntamiento y la Universidad, y privadas.  A todas ellas, a todos ellos, corresponde darles las gracias por seguir haciendo de Alcalá una ciudad diversa y rica.

Artículo firmado por Suso Abad, Concejal de Acción Social (Somos Alcalá).