Por Saúl Quijada
Aunque puede sonar a plato de comida japonesa, el wushu hoy en día está luchando por ser deporte olímpico. Este arte marcial que combina ataques, defensas, saltos, acrobacias y armas tiene su máximo valedor en Sergio Rus, un albaceteño que comenzó a practicar wushu con 6 años. Actualmente reside en Alcalá para poder desplazarse todos los días hasta Madrid y entrenar con un único objetivo; superarse a sí mismo.
– Para la gente que no lo conozca, ¿en qué consiste el wushu?
– El wushu es un arte marcial compuesta por Sanda (combate) y Taolu (rutinas). Esta última es la que yo practico y consiste en encadenar movimientos de ataque y defensa, técnicas y diferentes saltos y acrobacias, además se usan armas como sable, palo, espada, lanza… Es una disciplina muy vistosa y espectacular por las técnicas, la velocidad de ejecución y los movimientos acrobáticos.
– ¿Cómo y dónde surgió este deporte?
– El wushu es un arte marcial milenario con origen en China que usaban como defensa.
“El wushu tiene una variedad de estilos, de movimientos y de acrobacias que lo hacen diferente al resto”.
– ¿Tiene alguna traducción la palabra wushu al castellano?
– La traducción literal sería “arte marcial”, el wushu recoge todas las artes marciales chinas, es difícil de explicar porque en Occidente se conoce como kungfu los estilos tradicionales.
– ¿Cuáles son las principales normas?
– En la modalidad en la que compito, se trata de una rutina en la que se realizan diferentes movimientos obligatorios y técnicas según el estilo en un tiempo no inferior a 1´20 min. Los árbitros puntúan la calidad técnica (movimientos ajustados a su estilo, desequilibrios, caídas…) el overall (expresión, ritmos, coordinación, velocidad) y los ejercicios de dificultad que tienen un valor determinado (saltos, acrobacias, patadas en giro, etc.).
– ¿En qué momento decide empezar a practicar wushu?
– Empecé a practicar kung-fu a los 6 años en Albacete, mis padres me apuntaron como actividad extraescolar porque era un niño muy nervioso, nadie pensó que 22 años después seguiría practicándolo. Más tarde fui conociendo el wushu y en 2006 hice un curso con Raúl Estévez, mi actual entrenador y un referente para todo el wushu en España dada su trayectoria. En 2007 hice un viaje a China y entrené allí durante un mes, pude ver la manera que tenían de entrenar y aquello me motivó para seguir aprendiendo tanto que adapté prácticamente toda mi vida para poder entrenar a alto nivel, empecé a viajar de forma regular a Madrid, fines de semana, vacaciones, etc. Durante estos años he entrenado en Madrid de la mano de Raúl Estévez y formo parte del equipo del Centro de Alto Rendimiento de Madrid (CAR). Fui consiguiendo algunas medallas en Campeonatos de España y Torneos Internacionales escalando puestos en el ranking nacional. En 2014 conseguí ser miembro de la selección española y participé en el Campeonato de Europa que se celebró en Bucarest (Rumanía). Este 2015 ha sido un gran año para mí y me siento muy preparado para afrontar el siguiente.
– El pasado mes de noviembre consiguió un meritorio 8º puesto en el Mundial disputado en Jakarta, ¿cómo vivió el campeonato?
– Ufff… no tengo palabras, para mí es un sueño cumplido solamente estar allí, vivir ese ambiente y competir al lado de los más grandes, han sido muchos años de esfuerzo para poder vivir esta experiencia y mi mayor premio es la sensación de haber dado lo mejor de mí en un evento de gran magnitud como es un campeonato del mundo. Además haber conseguido un diploma de 8º puesto ha sido algo muy especial.
“Cada vez más gente se dedica a su práctica, el nivel es mejor cada año y se realizan más torneos a lo largo de la temporada”.
– ¿Tiene mucho futuro el wushu en España?
– Pienso que sí, es cierto que se dispone de muy pocas ayudas económicas, ninguna en algunos casos pues a los competidores nos cuesta dinero mantenernos a nivel de competición. Pero cada vez más gente se dedica a su práctica, el nivel es mejor cada año y se realizan más torneos a lo largo de la temporada.
“El wushu lucha actualmente por ser una disciplina olímpica, el día que se consiga se abrirán muchas puertas para que este deporte crezca más”.
– ¿Cuál debe ser la preparación tanto física como mental?
– Es una disciplina muy exigente ya que se requiere un alto nivel en todas las capacidades físicas, también a nivel mental pues la concentración debe ser máxima tanto en los entrenamientos como en la competición.
– ¿Cuántas horas dedica al día para entrenar?
– Entre dos horas y media y tres al día, cuatro o cinco días a la semana dependiendo del momento de la temporada.
– ¿De qué manera convencería a una persona para que practique wushu?
– Pienso que no se trata de convencer, yo animaría a la gente que le gusten las artes marciales a probarlo, el wushu tiene una variedad de estilos, de movimientos y de acrobacias que lo hacen diferente al resto y al que le gusta queda “enganchado”, siempre hay algo nuevo que aprender o alguna forma de superarse a sí mismo.