Entendiendo que la salud es lo primero y los delicados momentos que seguimos viviendo, he aquí una reflexión de los que nos dedicamos a la hostelería:

El Fogón de Amos (calle del Rico Home 18 en Alcalá de Henares), un mesón alcalaíno de los “de toda la vida”, se ha visto obligado a abrir sólo los fines de semana: los viernes a las 13 horas y los sábados y domingos a las 12, teniendo que cerrar los domingos a las 18 horas, según la normativa vigente.

Como para tantos otros hosteleros de Alcalá, la situación es muy difícil, muchos ya han echado el cierre y los que quedan sin terraza al aire libre, pronto lo harán si no cambia esta situación.

Mantener a nuestras familias y los puestos de trabajo más impuestos se hace imposible, porque no tenemos ayudas de ningún tipo y si no hay ingresos, no podemos pagar nada ni a nadie.

Nos desconciertan las contradicciones de los políticos que permiten mítines y conciertos.

¿Cuántas pequeñas empresas han cerrado ya? No sabemos exactamente, pero son muchísimas. Alguno puede que se asombre el día que sepamos el total.

Son tantas ya las que ya no pagan impuestos que por eso subirán algo más que el recibo de la luz.

Si la situación no cambia estamos ante la «amenaza de muerte» de la hostelería en Alcalá.

Amós Granero Espinosa es el propietario del local ‘Fogón de Amós’, en la ciudad complutense.