Entrevista: Vetusta Morla, el triunfo de la normalidad

Hablamos con Juanma Latorre, guitarrista de Vetusta Morla, antes del concierto de la banda madrileña este viernes 27 de septiembre en el recinto amurallado del Palacio Arzobispal.

Por Saúl Quijada

Uno de los grupos más importante de la última década en nuestro país visita Alcalá de Henares este viernes. Sus cinco integrantes no viajan en limusinas ni descorchan botellas de champagne en cada camerino; se comportan igual que lo hacían hace diez años cuando apenas veinte personas iban a verles a sus conciertos. “Ayer tocamos en el Teatro Romano de Mérida y todavía estamos flotando en la nube de lo increíble que fue. Estamos retomando el pulso de los directos fuera de los festivales”, nos cuenta Juanma Latorre nada más descolgar el teléfono para atender la llamada de La Luna de Alcalá. Después de un verano lleno de kilómetros por tierra y aire de festival en festival, Vetusta Morla llega a Alcalá una semana antes de embarcarse en una gira americana que les tendrá durante el mes de octubre por Estados Unidos. “Tenemos muchas ganas de tocar en Alcalá porque vamos a explorar matices de las canciones que no tenemos opción de hacerlo en los festivales y, lo más importante, no tenemos límite temporal”, concluye el guitarrista.

Con su último álbum de estudio, Mismo sitio, distinto lugar, Vetusta Morla ha descubierto nuevos territorios, tanto reales como conceptuales, que han permitido a la banda madrileña de Tres Cantos conseguir tres nominaciones en la pasada edición de los Latin Grammy. Como destaca Juanma, “la importancia de las nominaciones a los Latin Grammy no reside solo en el galardón sino en la importancia de extender nuestra música a toda la comunidad latina. Hemos conocido a muchos artistas de allí y hemos entablado bonitas amistades que se verán reflejadas en los trabajos del futuro”.

El incesante aperturismo musical y las ansias de descubrir caminos nuevos han llevado al grupo madrileño a situarse en un lugar privilegiado de la música de nuestro país compartiendo mesa con grandes estrellas del pop y del rock. Y lo han conseguido llevando como bandera la etiqueta indie, entendiéndola como una forma independiente de hacer las cosas y no como una mera designación de estilo musical. Vetusta llevado varios discos llegando al hueso de las canciones, encajando milimétricamente los versos con esa imaginación voraz, que es uno de los distintivos inequívocos del grupo, y con unas melodías frágiles que parecen sacadas de las cajitas de música que venden en las tiendas. Como cuenta Juanma, “este proyecto es el triunfo de hacer las cosas con el corazón y porque las sientes. Hay mucho pesimismo en el mundo, pero nosotros creemos que cuando alguien trabaja duro antes o después llegan los frutos”. Después de la gira por Estados Unidos, la banda regresará a España para preparar el show especial de fin de gira que tendrá lugar en el Wizink Center de Madrid en diciembre y que “todavía no nos hemos parado a planificar”, confiesa el guitarrista entre risas. “El fin de gira obedece a una necesidad de cambio de ciclo que está relacionada con la propia inercia artística de hacer cosas diferentes. Nosotros tenemos la inmensa suerte de concluir esta gira por este motivo y no por agotamiento o decisiones empresariales. Disfrutamos cada concierto que hacemos como si fuese el primero y eso se transmite en el escenario”.