Estos primeros días de diciembre han sido de aniversarios. Indiscutiblemente relevante, el de los 20 años de Alcalá como Ciudad Patrimonio de la Humanidad. Incipiente, el de la casa que ocupa desde el 4 de diciembre de hace tres años este edificio y con más nexos con la historia de la ciudad que lo que su nombre, Complutum, apunta.

No, no se asienta sobre una antigua domus romana…que sepa. Pero sí forma parte del conjunto de casas de la Plaza de San Diego vinculadas al proyecto universitario de Cisneros. Imposible definir su uso exacto. Sí se sabe que en todas estas casas residieron desde profesores a universitarios. Entre quienes vivieron frente al Colegio Mayor de San Ildefonso, el autor de la primera gramática castellana, el humanista Antonio de Nebrija.

Esta misma línea de casas desembocaba en la calle del toril, denominada así por ser el lugar por el que se desencajonaban los astados que se soltaban en los festejos de la plaza que hoy denominamos Cervantes

Y no deja de ser curioso también que en esas casas donde durmieron estudiantes hoy, entre otros, lo sigan haciendo en habitaciones con hasta 6 camas. O que donde se intercambiaba cultura tras las clases hoy se haga para enriquecer el tiempo de ocio con exposiciones, conciertos, talleres y conferencias.

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