La higiene de nuestros mayores / Por Raúl Moreno Herrada

La higiene de nuestros mayores  /  Por Raúl Moreno Herrada

La higiene personal es la suma de los actos de cuidados que realizamos a nuestro cuerpo; se trata de un proceso que permite una mejor defensa de la piel contra las enfermedades; sin ella, cualquier patología es susceptible de agravarse ya que el organismo es menos resistente y se encuentra expuesto a diversos patógenos. En la persona enferma, la higiene debe realizarse de manera mucho más minuciosa que en un individuo sano, ya que es fundamental que la piel cumpla eficazmente sus funciones.
La falta de higiene en la piel, debido a restos de orina o excrementos, por ejemplo, puede provocar infecciones, por eso es de vital importancia el aseo diario en los genitales, incluso varias veces al día. Con un correcto aseo del usuario se pretende:

  • Conservar el buen estado de la piel
  • Estimular la circulación sanguínea
  • Reducir la temperatura corporal en caso de fiebre
  • Refrescar al paciente

En el cuidado de la persona mayor, tenemos que destacar ocho puntos muy importantes: cuidados de la boca, del pelo, de las uñas, del baño, de los pies, cuidados respiratorios, nutricionales y de eliminación. De todos estos puntos, nos centraremos en tres de ellos en este artículo: cuidado de las uñas, de los pies y cuidados de evacuación.

Cuidado de las Uñas:

  • Consiste en hidratar uñas y cutículas cada día para mantenerlas blandas y evitar que se rompan.
  • Debemos, además, masajearlas para cuidar la circulación y, a ser posible, realizar la manicura una vez a la semana.

Cuidado de los Pies:

  • Acudir al especialista de forma periódica (podólogo).
  • Utilizar calcetines de algodón o nylon.
  • Utilizar zapatos cerrados o antideslizantes.
  • Examinar los pies a diario prestando especial atención a enrojecimientos, heridas, callos, durezas, etc.
  • Aplicar crema tras la limpieza.
  • Una vez a la semana, realizar baños de agua caliente realizando ejercicios de movilidad.
  • Frotar los talones con piedra pómez para eliminar la piel muerta y cortar las uñas en línea recta.
  • Dar masajes en los dedos y planta para favorecer la circulación.

Cuidados de Evacuación

  • Explicarle al usuario que no siempre es necesaria una deposición al día.
  • Facilitar al usuario el acceso al baño. El aseo debe disponer siempre de medidas de seguridad (barandillas, etc.).
  • Intentar recuperar en la medida de lo posible los hábitos miccionales mediante ejercicios vesicales.
  • Informar de la importancia de estar bien hidratado.
  • Valorar la posibilidad de usar pañales, contenedores urinarios, etc.