Hace unos meses Justo recibía un merecido homenaje. La asociación del Padre Ángel espera acabar la construcción de la catedral tras obtener todos los permisos municipales necesarios
Justo Gallego, el hombre solitario que dedicó a levantar sólo (sin estudios y con sus manos) «la Catedral de Mejorada del Campo» se ha ido para siempre. Fallecía este domingo a los 96 años, pero se marcha sabiendo que su obra, a pesar de la rumorología de los años que apuntaba a su destrucción, podrá quedarse en pie. Y lo hará, tras obtener los permisos municipales necesarios y después que hace poco Mensajeros de la Paz decidiera abordar el proyecto inconcluso.
La catedral hecha en gran parte con material reciclado y que se hizo famosa por un anuncio televisivo de Aquarius, siempre estuvo en el limbo legal ya que Justo la levantó sin tener estudios de arquitectura o diseño, pero Justo siempre manifestó que se inspiró en los mismos procedimientos de la Edad Media, cuando tampoco había arquitectos como tal.
El pasado 12 de octubre se cumplieron 60 años desde que Justo inició las obras. Lo hico tras contraer la tuberculosis: prometió que si se curaba construiría, él solo, una catedral dedicada a la Virgen del Pilar. Y ahí está. Falta poco para verla terminada (foto inferior del homenaje con el alcalde de Mejorada, Jorge Capa, hace sólo unos meses).
Aunque sin concluir su obra, puede decir que casi ha cumplido con su palabra: con materiales reciclados casi en su totalidad, en lo que entonces era un olivar se levanta hoy una catedral en un solar de 4.700 m2, de 35 metros de altura, con 12 torreones de 60 metros, 28 bóvedas y más de 2.000 vidrieras, que llegó a modo de exposición hasta el MoMA de Nueva York. Además, diversos artistas han colaborado en la decoración actual.
Hace tiempo que Justo tuvo que abandonar el trabajo y la continúa hoy el padre Ángel, presidente de Mensajeros de La Paz a quien ha donado su templo. La asociación del Padre Ángel espera acabar la construcción de la catedral en dos años tras obtener los permisos municipales. Para ello ha encargado el proyecto a Calter, una empresa de ingeniería estructural especializada en edificación y rehabilitación.
