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Soledad Vélez: “Cuento sensaciones que provocan situaciones”

ENTREVISTA SOLEDAD VÉLEZ

Por Saúl Quijada

La historia de Soledad Vélez va de aviones y sueños. De proyectos que se quedaron en el camino y de nuevas oportunidades que llegaron. Su historia avanza desde el folk a la electrónica pasando por episodios de soledad, melancolía, alegría y pánico. Sensaciones que nos cuenta en sus canciones. Con el último disco ha querido romper lo establecido buscando un sonido nuevo y peleando a la contra para conseguir sentirse bien con su yo interior; algo esencial en su cabeza. Este viernes 30 actúa en The Green Irish Pub de Alcalá de Henares (22 horas).

– ¿Por qué decide hacer la maleta,  coger un avión, cambiar de vida y abandonar Chile?

– Lo decido porque quería dedicar mi vida a la música y además me apetecía cambiar de aires.

– Y elige España.

– Me vengo porque tenía un amigo músico que me propuso un proyecto aquí y por eso me decanté por España.

“Llego a lo que busco de una manera inconsciente”

– Publica su  primer disco en 2012, ¿cómo vivió todo el proceso?

– Con mucha intensidad por todas las cosas nuevas que vienen. Estuve muy a gusto porque además inicié la gira rápidamente y echando la vista atrás lo veo como algo muy positivo.

– ¿Qué balance hace de los dos primeros álbumes?

– El primero fue mucho más folk que era lo que me pedía el cuerpo. El segundo trabajo empezó a teñirse de otros sonidos y utilicé otros instrumentos como el sintetizador a la hora de grabar. Creo que el público notó la diferencia y es algo importante.

– ¿A qué se debe el cambio de sonido en el último disco con respecto a los anteriores?

– A las  ideas y emociones de mi cabeza. Me ha salido el disco de forma natural y la verdad es que estoy muy contenta con el resultado.

– Ha optado por la autoproducción en “Dance and Hunt”. ¿Cómo consigue tener una visión objetiva de sus canciones para trabajar con la cabeza y no con el corazón?

– Cuando compongo una canción a la vez estoy visualizando todo lo que va alrededor. Es decir, cómo la voy a instrumentar, cuál va a ser el estilo, qué tipo de batería voy a utilizar…Tengo todo muy claro, pero a veces me ocurre que llego a lo que busco de una manera inconsciente pero liga muy bien con todo el trabajo y cobra sentido.

“Mi mayor ambición es sentirme feliz, plena”

– Los dos primeros trabajos están formados por 12 canciones mientras que en el último hay 9. ¿Menos es más?

– Era algo emocional y decidí que fueran nueve por una cuestión temporal. Sentía que en el espacio-tiempo el disco estaba cerrado

– ¿Cuál es su mayor ambición en la música?

– Sentirme feliz, plena. Cuando algo perturba ese estado aparece la tristeza y las cosas dejan de valer la pena.

– Es contradictorio el sentido de felicidad que propone con su gusto por la soledad y la melancolía.

– Hace poco que llegué a la conclusión de que me gusta la soledad por mi nombre. Por llamarme Soledad le dejé de tener miedo a la soledad. No creo que la soledad sea distinta a la felicidad porque lo considero como algo positivo donde te encuentras a ti mismo.

– ¿Cómo se consigue disfrutar de la soledad?

– Pensando que cuando estás solo no estás solo.

– Hay muy poca letra en el disco, ¿cree que la música transmite más que la palabra?

– Depende del mensaje que quiera transmitir el compositor. En mi caso, intento que la gente sienta por la forma en la digo las cosas. Prefiero que se emocionen por el sonido de mi voz que por el mensaje. De esta manera se crea un vínculo especial con el público.

– ¿Qué historias cuentan sus canciones?

– He decidido no hablar de mis historias y describir situaciones.

– ¿Por ejemplo?

– Cuento sensaciones que provocan situaciones. Me quedo con una emoción y compongo en torno a ella.

– ¿Y eso cómo se hace?

– Imagina que voy a escribir una canción sobre el footing. Yo te hablo de la agitación, de la concentración, de la respiración…

– Es decir, se fija en lo abstracto.

– Exacto. Intento comunicar de manera abstracta para que la idea se disuelva bien entre la gente.

– Sin embargo en los conciertos se transforma y se suelta la melena.

– Es todo muy raro. Una vez que me subo al escenario dejo de tener pánico y parece que estoy como en otro planeta.

– ¿Cuál sería la sensación abstracta  que experimenta en el momento de subirse a un escenario?

– No sé cuál es la razón pero empiezo a conectarme de manera muy real y honesta con lo que soy.

– Empezó la carrera de arquitectura por tanto sabrá cuál es la estructura perfecta para una canción.

– ¡Ya me gustaría conocer cuál es la mejor estructura! Me gustaba la arquitectura pero sentía que estaba perdiendo el tiempo con la carrera, era como no tomarse en serio a una misma.

– ¿Ha probado a buscar la relación arquitectura-música?

– Todos los trabajos son muy parecidos porque tienen un desarrollo y un planteamiento. La clave para disfrutar un trabajo son las sensaciones, conectarte como persona. Estuve trabajando varios años en una pescadería y me sentía muy bien porque lo disfrutaba de una manera especial.

– ¿Rodeada de merluzas y pescadillas salían canciones?

¡Por supuesto!