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El hogar es nuestro santuario. Es un espacio personal, el lugar donde más tranquilos debemos estar, y para ello tiene que resultar acogedor. No obstante, es habitual que la gente viva en pisos no demasiado grandes y con un almacenamiento limitado, lo que complica mantener un orden y contar con el espacio libre necesario. Hoy en día, la sensación de que las paredes del hogar se nos vienen encima es bastante habitual debido, principalmente, al espacio que ocupan nuestras pertenencias, aunque hay ciertas medidas que podemos tomar para evitarlo. Por eso, a continuación, vamos a dar algunos consejos de utilidad para ganar espacio en casa.
Tener en cuenta el orden
Ante todo, hemos de tener clara una cosa: el orden es primordial para que nuestro hogar sea acogedor, pero también lo es para que podamos aprovechar al máximo el almacenamiento del que disponemos. Por eso, todo debe llevar un orden. Por ejemplo, los elementos que vamos a usar más a menudo deben estar en las zonas más accesibles, mientras que todo aquello que no solemos utilizar puede guardarse en altillos, armarios altos o en la parte posterior de los cajones.
Una correcta distribución de los armarios
Hay ocasiones en las que la falta de tiempo o de energías nos lleva a guardar nuestras cosas en el primer rincón que encontramos; no obstante, hay veces en las que, directamente, no disponemos de espacios de almacenamiento bien planificados. Un armario demasiado pequeño, o con una distribución que no sea funcional, puede agravar el problema en lugar de solucionarlo. Así, este es un tema que debe tenerse en cuenta.
Es decir, hemos de pensar bien qué armarios vamos a instalar en casa. Estos tienen que adecuarse al espacio de cada estancia, pero también deben ser lo bastante espaciosos por dentro como para poder guardar nuestra ropa, herramientas u otras pertenencias. Y, aunque la funcionalidad debe ir por delante de la estética, es aconsejable que el armario no ocupe demasiado espacio visual. Así, elegir modelos con puertas planas, o de colores similares a los de las paredes, harán que pasen más desapercibidos.
Recurrir a trasteros como solución externa
A veces contamos con pertenencias de las que no podemos deshacernos, pero que no vamos a utilizar a menudo. Tal vez sean elementos de acampada que solo empleamos en verano, o se trate de la decoración de Navidad. También es posible que contemos con muebles que no podemos poner en casa, pero que aguardan a una próxima mudanza. En esos casos, recurrir a un trastero será la opción más adecuada. Hoy en día es posible encontrar servicios de alquiler de trasteros en Madrid muy eficaces y que brindan soluciones de diversos tamaños para adaptarse a las necesidades de cada cliente.
Hacer limpieza
Por último, quizá almacenemos demasiadas cosas, sencillamente, así que lo más recomendable será hacer limpieza. Tendremos que examinar las cosas, y preguntarnos con sinceridad si las necesitamos, o si nos podemos deshacer de ellas. Tal vez haya cosas que podamos vender de segunda mano para ganar un dinero extra. De lo contrario, podemos donarlas o simplemente reciclarlas. En todo caso, el espacio que ganaremos en casa nos hará sentir mejor.
