Vicente Ferrer, héroe contra la pobreza / Por Francisco Pérez

En Anantapur siguen llorando la ausencia diez años después de tu muerte. Toda tu vida dedicada a los más pobres, a la ayuda, a la cooperación y al desarrollo del tercer mundo y ya ves… la gente aquí en el primer mundo preocupada por la ausencia de Michael Jackson. Nos faltan auténticos héroes y nos sobran señuelos que perseguir; nos faltan medallas de oro en la erradicación de la pobreza y nos sobran “influencers”.

¡Qué pena de medios de comunicación que no han dejado pasar la ocasión de conmemorar los diez años de la muerte de Michael Jackson, pero han olvidado tu muerte, tan sólo seis días antes!. ¡Qué pena de periodistas, de profesionales de la información formados (o deformados) por planes de educación cuyo objetivo era lograr personas autónomas, capaces de razonar por sí mismos, de tener ideas propias!

“Al final, las obras quedan, las gentes se van” decía Julio Iglesias. Tras de ti, 3148 pueblos y casi tres millones de personas en India que lloran tu ausencia y te recuerdan como un hombre altruista, capaz de cambiar el mundo pese a todas las barreras, que rezan por ti cada día cuando la tarde cae y se encienden las estrellas.

Mientras, este mundo absurdo, capaz de llegar a la luna o de trasplantar un corazón, no se inmuta, no se escandaliza con las muertes por hambre y enfermedades de miles de personas diariamente. Envuelto en guerras y egoísmos, empeñado en destruir una canica de vida azul que deberíamos cuidar con mimo en nuestro breve paso por aquí y dejárselo igual o mejorado a nuestros hijos y nietos.

Decía Gustavo Adolfo Bécquer: “¡Dios mío, qué solos se quedan los muertos! “, pero yo quiero brindar por ti, recordarte en este día, hablar en nombre de los millones de hombres y mujeres de bien, silenciosos, solidarios.

En el décimo aniversario de tu muerte. ¡Viva Vicente Ferrer!.