Tres millones de euros del remanente municipal en Marchamalo para hacer frente a la crisis económica que llegará tras el coronavirus


En el pleno, celebrado telemáticamente, también se ha aprobado la modificación del Plan de Ordenación General Urbana, que permitirá la modificación del aspecto exterior de la ermita de la Virgen de la Soledad

La actual crisis sanitaria y la posterior crisis económica derivada de la pandemia de coronavirus, han marcado el desarrollo del pleno celebrado hoy en el Ayuntamiento de Marchamalo. De hecho, por primera vez en su historia, la sesión ordinaria se ha celebrado de forma telemática dadas las restricciones impuestas por el decreto gubernamental del Estado de Alarma.

Durante la sesión se abordó la situación de emergencia sanitaria motivada por la pandemia de COVID-19 y la crisis económica que se avecina, ante la cual el Alcalde, Rafael Esteban, anunció que incorporarán 3 millones de euros del remanente de tesorería municipal para “atender las necesidades que puedan surgir”. Todos los acuerdos sometidos a votación durante la sesión salieron adelante por unanimidad, incluida la ratificación de los decretos emitidos por la Alcaldía durante estas semanas y dos modificaciones presupuestarias para dotar de recursos dos partidas de ayuda económica a los más desfavorecidos. Inicialmente, se dota una de ellas con 100.000 euros para contrataciones en un nuevo Plan de Empleo Municipal extraordinario, y se suplementa con otros 100.000 euros la partida de Ayudas de Emergencia.

Como corresponde con la situación de emergencia motivada por la pandemia, este ha sido el asunto que ha motivado los principales acuerdos de la sesión, en la que la unanimidad ha sido total entre las cuatro fuerzas políticas representadas (PSOE, PP, UP y Ciudadanos), si bien se han abordado también asuntos de índole administrativa y urbanística que estaban pendientes de la ratificación en el pleno.

Los más relevantes de ellos han sido la modificación del Plan de Ordenación General Urbana, que permitirá la modificación del aspecto exterior de la ermita de la Virgen de la Soledad, edificio declarado de interés cultural, para que vuelva a contar con un porche cubierto en su entrada principal flanqueado por columnas; y la renuncia a su acta de concejal de Rubén Gutiérrez Berlinches, que presentó su dimisión como representante de Unidas Podemos por razones personales. El acta de concejal que queda vacante será cubierta por la siguiente persona situada en la lista de la candidatura de su partido a las últimas elecciones municipales, una vez ratificado este hecho por la Junta Electoral Central.

Acuerdos adoptados 

Los primeros acuerdos sometidos a votación en relación a la situación de emergencia motivada por la pandemia de COVID-19 fueron los numerosos decretos dictados por la Alcaldía durante el último mes, como consecuencia de la expansión de los contagios por el virus, las informaciones que se iban teniendo respecto a su forma de propagarse y su incidencia en la salud pública, así como los decretos emitidos a su vez desde el Gobierno de España y el de Castilla-La Mancha, siempre de acuerdo con las autoridades sanitarias y en consonancia con la legislación vigente.

Cabe recordar que las primeras medidas contra la propagación de este nuevo virus se tomaron ya el día 5 de marzo, con la instalación de dispositivos de higiene personal extraordinarios en todos los edificios públicos del municipio, así como un refuerzo adicional en los servicios de limpieza de los mismos, siendo el primer decreto dictado desde el Ayuntamiento de Marchamalo con fecha del 10 de marzo, en el que se comunicaba el cierre de todas las instalaciones municipales dos días después. El Gobierno de España aprobó el decreto del Estado de Alarma el 14 de marzo.

Pero además de la ratificación por parte de todos los grupos políticos municipales de estas actuaciones, el pleno también ha acordado unánimemente la dotación extraordinaria de dos partidas del Presupuesto Municipal de 2020 con créditos adicionales obtenidos tanto de la merma de otras partidas destinadas a la contratación de personal municipal que va a posponerse en el tiempo, como de la incorporación de una parte del remanente líquido de tesorería del pasado año 2019.

Así pues, se suplementarán con 100.000 euros cada una tanto la partida destinada a los Planes de Empleo, con el objeto de hacer 20 contrataciones con fondos municipales adicionales a las ya realizadas en el reciente plan subvencionado por la Junta, como la de Ayudas de Emergencia, que inicialmente contaba con 5.000 euros para atender a las familias desfavorecidas del municipio. En total, 200.000 euros que se emplearán directamente en ayudas económicas a las personas más perjudicadas por la crisis económica derivada de esta emergencia sanitaria, al haber perdido su empleo o no lograr encontrar uno, carecer de ingresos y no poder atender sus necesidades básicas.

“Con esto intentamos dar una solución inicial y urgente a las personas de Marchamalo que peor lo van a pasar durante los próximos meses, más allá de las familias a las que ya se está atendiendo a través de los Servicios Sociales Municipales, poniendo a disposición cuanto antes los remanentes que tenemos acumulados”, una ayuda que se sumará a los acuerdos ya adoptados en por la Diputación Provincial “que además de posponer el cobro de los impuestos y tasas que tendrían que abonarse durante estos meses, también está preparando distintas líneas de ayuda para municipios, empresas y desempleados”, ha señalado la Concejala de Economía y Hacienda, Susana Alcalde.

El Alcalde, Rafael Esteban, adelantó en esta misma línea que “en el pleno que celebraremos próximamente incorporaremos al presupuesto los 3 millones de euros de remanente de tesorería que tenemos para poder emplearlos, si fuera necesario, en líneas de ayuda a PYMES, autónomos y desempleados de nuestro municipio, además de cubrir partidas que necesitarán más recursos o ser reforzadas por la merma de ingresos que seguro que tendrá también el Ayuntamiento”, algo para lo que hay que esperar a los acuerdos que tome el Gobierno de acuerdo a las peticiones realizadas por la FEMP para la relajación de las estrictas normas financieras que sufren los municipios y que impide el uso de todos sus recursos económicos con libertad de acción.