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Yo me voooy del Manzanares / Por Dany Sánchez

Hemos dicho adiós al Vicente Calderón y da la sensación de que hasta que no toque ir al primer partido en el Wanda Metropolitano no lo vamos a asimilar. Es como que los que hemos crecido allí y nos hemos aficionado al fútbol allí, no queremos darnos cuenta de que el Calderón se ha ido para siempre…sí, para siempre.

En unas reflexiones hechas desde mi sentimiento atlético y no como parte del club, lo cierto es que la recta final del templo rojiblanco hasta llegar a la línea de meta, ha sido espectacular.

La despedida de la Champions del Calderón frente al eterno rival, y pese a la derrota en la eliminatoria, le sirvió a la afición rojiblanca para cargar pilas contra el madridismo, aunque eso muchos “no lo puedan entender”. Me quedo también con el último y entrañable partido de liga frente al Athletic, donde el evento final de despedida fue pensado por y para la afición huyendo de espectáculos rimbombantes o artificiales, para hacer que las lágrimas tomaran las gradas del Calderón. Y si todo eso fuera poco, tras la bonita despedida del partido de Leyendas, el TAS quiere seguir haciendo historia y ha querido poner la última piedra en el camino para que el Atléti no tenga una mudanza fácil al Wanda Metropolitano adoptando una decisión que se convierte en un agravio comparativo con respecto a otros clubes que estaban en la misma situación…pero eso es algo que ya los atléticos “sí sabemos entender”.

Pero todo eso es atrezo comparado con los momentos vividos por todos a los que se nos han congelado allí los pies en invierno, y a los que se nos han quemado “las posaderas” en los meses de sol. Miles de momentos como el primer gol de Luis Aragonés y los últimos de Fernando Torres; las medias caídas de Rubén Cano; las cabalgadas de Futre; los córners de Pantic; las flores de Margarita; el arquero de Kiko; los “arrestos” de Simeone; el Kun; los días de derbi; las avalanchas; las Mahous entre amigos; el doblete; el descenso; la despedida de Luis Aragonés; los niños moviendo el balón de la Champions; los tifos; el himno a capela; los partidos de nuestra querida selección española; el himno de España en las Copas del Rey; los conciertos….

Se cierra un capítulo de nuestras vidas. Pero parece que sólo nos daremos cuenta de que no estamos allí cuando entremos el próximo mes de septiembre en un Estadio Top que tendrá de todo….menos historia. Pero la historia se escribe con el día a día y para eso la afición del Atléti es ejemplar, por lo que no tardaremos en empezar a coleccionar momentos Wanda Metropolitano para escribir páginas y páginas de una nueva historia de pasión y sentimiento diferente al de cualquier otro club del mundo y que, pese al TAS, celebrará triunfos y grandes días de gloria en nuestra nueva casa.

Sólo queda agradecer….agradecer a toda la afición del Atléti que con su pasión incondicional permita, ahora y siempre, en el Calderón o en el Wanda Metropilitano, que el resto del mundo del fútbol, “siga sin poderlo entender”. Y nos vamos como siempre, cantando nuestro himno, pero con un pequeño matiz: “Yo me voy del Manzanares, del Estadio Vicente Calderón…”.

¡Nos escuchamos en el Wanda Metropolitano!

(*) Dany Sánchez es la voz del Vicente Calderón